ACCION POR LA UNIDAD MUNDIAL A.U.M.

Invita

Consideremos los Equinoccios y los Solsticios: son tiempos sagrados. ¿Por qué? Porque se acercan dimensiones, se abren puertas entre ellos. No sólo pasa el Sol por el punto equinoccial o solsticial, según la explicación astronómica corriente. No, no es sólo un hecho de la mecánica celeste, desligado de la vida humana según la mente común, hay que sensibilizarse respecto a la íntima relación entre el Sol y la Tierra; ocurre aquel acercamiento, y se abren puertas, vías de comunicación que podemos aprovechar para la curación definitiva e Iluminación espiritual. El ritual nos enseña a manejar esas energías cósmicas y terrestres. Bien lo dijo el salmista: “Los cielos y la tierra proclaman la gloria del Creador”.En ese momento el verdadero sabio logra penetrar allí y, quienes le acompañan, aunque aún no tengan evidencia de ello, sienten la convicción, la fortaleza y la mirada de ese sabio cuando actúa así; lo comparan con el erudito que lee y habla de libros, sacando datos de su memoria, mecánicamente, que no tiene esa disposición sagrada ante la vida y la educación que imparten es una evidencia más, y sacan sus conclusiones. Así es la constitución del universo, las Leyes de Dios, sus mandamientos que valen para todos.