EL VERDADERO SIGNIFICADO DE LA NAVIDAD


Sigamos descorriendo los velos que ocultan el sentido profundo de la presencia cíclica de los Grandes Guías Espirituales de la Humanidad, Avatares, Mesías, Cristos, Budas, Krishna, Profetas, etc. Cito esta vez unos párrafos de “¿Cuál es el Significado de la Navidad?” por nuestro Venerable Hermano Mayor, Sat-Gurú Dr. José Manuel Estrada: incluido en la obra “Enseñanza Viviente”, pág. 311

“… El nacimiento de Cristo obedece al cumplimiento de un símbolo, que a su vez es la expresión de la Ley de Evolución Cósmica que se manifiesta en todas las ́Tierras ́ de todos los sistemas solares que pueblan el Universo infinito. Estando el Macrocosmo íntimamente ligado al Microcosmo, las leyes de aquel se manifiestan en éste. Y siendo el Cosmos trino, los efectos de esa Ley de Evolución se manifiestan en los tres planos: físico, astral y mental. Además, como la evolución de lo grande no puede realizarse sin la evolución de lo pequeño, existe una íntima relación entre la evolución de las estrellas y la evolución del microcosmos.

“Todos los universos son campos magnéticos que tienen un centro de transmutación de energía divina en energía física, lo cual da origen a la materia que con sus leyes físicas y químicas presenta la hermosura y sabiduría de la Madre Naturaleza en constante evolución. Estos centros de transmutación son los Soles que pueblan el Universo, uno de los cuales es nuestro Sol. Nuestro sistema solar es exactamente igual a los demás sistemas solares, así que “al estudiarlo estudiamos a todos.

”“…La Emanación Divina se polariza, por así decirlo, a través del Sol. En virtud de ello se producen los fenómenos tanto químicos y físicos como mentales y espirituales del sistema solar, siempre regulados por leyes que mantienen el ritmo de la vida universal.

“Por ejemplo, la Tierra, al dar la vuelta al Sol produce dos movimientos en el campo magnético solar, uno de expansión y otro de contracción (se trata del campo magnético mental y espiritual del Sol, no del campo electro-magnético). Esta sístole-diástole se sincroniza con el movimiento de traslación de la Tierra y el de rotación, dando lugar al evento anual en el día más largo y la noche más corta del año en junio, solsticio de verano: comienza la sístole solar; al ir disminuyendo la duración de los días a partir de esa fecha, aumenta la contracción del campo magnético espiritual del Sol, por no decir del campo divino.

“Cuando el Astro Rey llega a Libra, septiembre 22, ocurre un equilibrio debido a dos fenómenos: por la polaridad con el equinoccio de primavera, y por ser ese lugar el punto equidistante entre el 24 de junio y el 24 de diciembre, aunque no es exacto numéricamente por los 4 o 5 días de diferencia entre el solsticio de verano y el equinoccio de otoño, tal como ocurre de éste al solsticio de invierno.


“Los cambios espirituales los define el Sol (me refiero al movimiento sístole-diástole, mejor dicho, a la relación entre las fechas y el movimiento). El 24 de diciembre finaliza la contracción anual del Sol, comenzando así la expansión; se trata del más corto y la noche más larga del año. La Tradición enseña que ese día nuestro sistema solar hace contacto con la diástole de la galaxia, estudio muy complicado al cual dedicaremos luego una clase; por ahora solo mencionaré que los movimientos del Sol, de la Tierra y de la galaxia Vía Láctea ocurren a la manera del mecanismo de un reloj, trabajando al unísono como partes integrantes de la célula del Macrocosmos. Digamos que el 24 de diciembre hace conexión la sístole del sistema solar con una especie de diástole que se produce en el centro de la galaxia. Si cabe la comparación, digamos que se produce la Chispa Divina en todos los sistemas solares de nuestra galaxia; o sea, que nace el Cristo en cada una de las Tierras que están en los sistemas solares que forman la galaxia. Como dijo el Maestro Jesús: “En la Casa de mi Padre hay muchas moradas…”

Nuestro Hermano Mayor, Sat-Guru José Manuel Estrada trata aquí un profundo tema dentro del campo de la Astrosofía, el campo esotérico de la antigua Astrología, cual es la relación entre el Macrocosmos y el Microcosmos, de acuerdo al precepto hermético “Como es arriba así es abajo”. Esa relación corresponde al sentido de la presencia del espíritu humano en la Manifestación Universal y en particular en la Tierra. Sería absurdo creer que en el infinito Universo solo hay vida inteligente en este granito de polvo que es nuestro planeta. Los astros se mueven porque están dotados de vida (los muertos no andan), y donde hay vida ésta se manifiesta en la diversidad de especies y reinos que pueblan los planetas de los incontables sistemas solares en todas las galaxias.

”… Al mencionar la Chispa Divina me refiero a la sintonización del Empíreo (magnetismo del centro de nuestra galaxia) con el Plano Solar, que es un campo magnético de polaridad diferente, dando lugar a la formación del Magnetismo Crístico que recibe especialmente el reino animal. En éste, hace diez millones de años, este fenómeno produjo el acontecimiento que llamamos la razón; así los animales racionales se separaron de los irracionales: ésta fue la primera iluminación que recibió el reino animal. De 1.500 a 2.000 millones de años atrás, se produjo el mismo fenómeno en las aguas, con los primeros vestigios del reino animal, en uno de los tantos millones de veces que el Sol ha pasado por la constelación de los Peces.

“Más recientemente, hace unos dos mil años, con el nacimiento del Avatar de la Era de Piscis se abrió la etapa del Hijo del Hombre, al llegar el punto vernal al cero grado de la constelación de Piscis. Jesús el Nazareno fue el prototipo de ese nuevo tipo de humanidad. Pero como la evolución es lenta, solo algo nos dejó vislumbrar cuando dijo: Cuando levantéis al Hijo del Hombre entenderéis mis palabras…

“Nuestro Movimiento universal viene justamente a levantar entre los humanos a ese Hijo del Hombre. Pero hay un punto muy importante: Jesús fue el hombre símbolo de la Era de Piscis, su nacimiento simboliza el nacimiento del Cristo interno en cada ser humano, y el sendero que todos tenemos que recorrer antes de alcanzar el 7º Grado de Iniciación, osea, la Conciencia Crística. Por ello Jesús nos presenta la manera de lograr ese Nuevo Nacimiento al nacer en un pesebre junto a los animales, simbolizando nuestra unión con el reino animal (observen que lo rodeaban animales mamíferos, tal como los antropoides de donde viene el humano). Nacimiento que nos enseña que la nacer un niño cualquiera, hay dentro de él un Niño Dios en embrión. Luego el Maestro Jesús sufre muchas vicisitudes…

Este tema del Cristo Cósmico y su correspondencia en la Tierra con el Linaje Crístico, es difícil de entender para las mentes acostumbradas a oír desde niños el concepto devocional y religioso de Jesús el Cristo, sin estudios ni investigaciones respecto a ese trasfondo de sabiduría y sus leyes que gobiernan la evolución de la vida en el Universo. Sabiduría divina que la ciencia de hoy no alcanza a penetrar, pues tiende más a lo material, lo industrial y comercial que costea sus investigaciones. Pero los científicos de avanzada en estos comienzos de la Era, que vibran con lo espiritual, lo sagrado, lo que trasciende la supervivencia material, ya van descorriendo esos velos de ignorancia. Confiemos en el porvenir de esa Nueva Humanidad del Hijo del Hombre, sucesora del Hijo de Dios de la Era pasada. Nueva Humanidad que aletea en las nuevas generaciones, a pesar de estar inmersas en un mundo materialista, contaminado, viciado, desorientado en medio de tantas comodidades y de un progreso que no resuelve los problemas humanos de siempre. Nueva Humanidad que busca salir a la luz en cada uno de nosotros, buscadores de la Verdad Universal. La fe apoyada en el Saber sagrado es nuestra antorcha. D. Días P.

“… Jesús es sometido a pruebas hasta alcanzar la crucifixión. Es allí donde resucitará el Ser Universal, apresado en la materia durante millones de años. (Recuerdo que el MS Maestre SRF me escribió desde la India diciéndome: ́Estrada, hay que descubrir qué somos desde antes de aparecer el universo ́-.

“Pues bien, ese acontecimiento ocurre a mitad del recorrido de la Tierra, en el período diástole del Sol. Es llamado Crucifixión Solar, pues se dice que en el equinoccio de primavera el Sol está crucificado, derramando su sangre sobre la Tierra para revivir la naturaleza. Simbólicamente muere el hombre crucificado y nace el ́Hijo del Hombre ́. El hombre espiritual, por eso dice que es Glorificado.


“En virtud de que el infinito Universo existe para servir al ser humano, el fenómeno del nacimiento del Cristo, consecuencia del despertar del ser interno, está directamente ligado al desarrollo global del Cosmos Infinito. De allí la igualdad de acontecimientos en todos los sistemas solares. Para futuros estudios de este tema del Engranaje Cósmico entre el Sol, la Tierra y la Galaxia, tomemos nota de que la Tierra recorre su órbita en 365 días, 6 horas, 48 minutos y 30 segundos a razón de 30 kms por segundo; el Sol recorre su órbita alrededor del centro de la Galaxia en 250 millones de años a la velocidad de 120 kms por segundo; y la galaxia nuestra, la Vía Láctea, gira sobre sí misma, describiendo un pequeño círculo en torno a un punto en el espacio, a razón de 300 kms por segundo, movimiento que hace ver que las estrellas se desplazan en forma irregular, alejándose del Sol y hacia la periferia de la galaxia.

Por último, hay un movimiento del Sol que coincide con el citado de la galaxia, como sigue: así como el polo terrestre se mueve dentro de un perímetro de solo 20 metros, de igual forma el Sol describe círculos dentro de un perímetro relativamente corto, cerrando el círculo en 40 mil años. Observemos entonces que la relación del Macrocosmos con la vibración de la Tierra en sus polos magnéticos es la misma que la del Sol con la Galaxia. Existe, pues, un tejido magnético entre la Galaxia, el Sol y la Tierra.

El estudiante debe penetrar en la esencia misma de este estudio para poder desentrañar en qué consiste la Alta Iniciación. (FIN)

Esta elevada enseñanza del Sat-Gurú y Hermano Mayor Dr. J. M. Estrada es preparatoria para los discípulos que, después de haber transitado por la Escala Somática, primera y elemental en el Sendero Iniciático, estén dispuestos a penetrar en los Arcanos de la Alta Iniciación a nivel de la Escala Aerosómica. Dispuestos no por ambición, sino porque se consideran preparados en las disciplinas iniciales de la Escala Somática que culminan en la ética universal, para entonces afrontar las Pruebas y sacrificios al colocarse ante el Misterio de la Esfinge, que les dará paso a la Pirámide. Pues la Escala Aerosómica es el Sendero Ascendente, mientras que la Escala Somática, la única presentada en esta Era hasta ahora, es horizontal. T.A-O D. Días Porta domingo.diasporta@gmail.com Año 75 de la Edad Acuariana, año profano 2023.